martes, 29 de marzo de 2011

Una barbacoa para que Oxford ganara de nuevo.




No sé como resultó la cosa, la cuestión es que Jorge -ávido de eventos típicamente british con los que jalonar su blog- propuso ver la centenaria carrera por el Támesis entre Oxford y Cambrigde y repetir la aventura que ya vivimos hace dos años. Entonces a David y a mi se nos ocurrió hacer una barbacoa ya que vivimos a sólo unos escasos diez metros del río. David le pidió la barbacoa al casero, pasamos una tarde limpiando las rejillas que, por su estado, podrían no haber sido usadas desde que se disputara la primera carrera y tras cuatro o cinco viajes al supermercado, dejamos todo listo para acoger a nuestros invitados. El menú fueron patatas fritas de bolsa, un par de ensaladas, mucha carne, Foster, Calsberg, Kalimocho, tinto de verano, Rebujito, coca-cola, zumo de naranja, fruta y un lomo embutido.

Fuimos en torno a los 25, estuvieron los de Clapham, los de Tooting, los de Paddington, una canguro de Putney, los del condado de Kent, algún francés, una griega, una recién llegada que hubiera necesitado un mapa, otra de Ohio, uno que se perdió y fue recogido en la puerta y luego se unieron un grupo de ingleses que nadie conocía, un par de amigas muy guapas que se perdieron la carne abrasada por fiestas inoportunas el día anterior y la otra por una supuesta timidez que nadie podría creer.

La organización gracias a los denodados esfuerzos de los anfitriones no fue del todo mala -creo-, falló una cosa: se nos olvidó comprar tenedores de plástico... así que a última hora tuvimos que echar mano de nuestra escasa cubertería y como castigo nosotros usamos palillos.

No estuvo mal, fue un buen día. Reímos, bebimos y comimos, qué más se le puede pedir a un sábado sin sol.

Ganó Oxford.

Last Saturday David and me organized a BBQ at home. After four hour cleaning the bbq and going back and forth the supermarket we were ready to host around 25 people and give them some drinks and food. I think we had fun and after all we had only two problems: we forgot to buy plastic forks and Oxford won. It was a good Saturday, even it was without sun


BBQ the boat race. from calvanki on Vimeo.

jueves, 17 de marzo de 2011

¿Nos gustan las normas que nos frustran?



Leí hace poco en el blog de una amiga una reflexión sobre las normas a las que estamos sometidos diariamente. Especialmente aquí en London, una ciudad que ha desarrollado un exquisita adicción por las reglamentaciones. Normas que direccionan, conducen y ordenan nuestra existencia. Desde la fila argamasada por un segurata armario empotrado para entrar en un concierto, a la señal de tráfico que te advierte que si pasas en rojo puedes acabar espachurrado y con tus sesos por el arcén, la que te prohibe a determinada hora disfrutar de un parque o la que te insta a tirar el plástico inservible de un paquete de tabaco recién abierto en una papelera u otra con la finalidad de preservar el medio ambiente o al menos no joderlo más de lo que ya de por sí le jodemos.

Supongo que ni siquiera somos conscientes de hasta que punto y nivel hemos interiorizado el descifrado, uso y sometimiento a esas normas que regulan nuestro comportamiento cotidiano. Si reflexionamos un segundo se nos antoja exagerado la cantidad de preceptos que obedecemos automáticamente sin el menor atisbo de duda, sin suspicacias, en el simple trayecto que enlaza el salón de tu casa con la estación de metro más cercana. Pasa por aquí, no pases por allí, mira a tu izquierda, quieto ahí parado, ahora anda, no traspases la linea amarilla, paga (siempre paga), sitúate a la derecha, por ahí no se puede cruzar, por aquí sí...

¿Son estas normas, reglas, señales una red que nos protegen de nosotros mismos?

Rotundamente sí.

Así que más que nos gusten las normas que nos frustran quizás quepa decir que dependemos de ellas, dependemos si no queremos que el segurata armario empotrado nos parta la cara y nos deje tuerto o dependemos porque nuestra sesera es algo demasiado valioso para nosotros mismos como para que se convierta en el desayuno fresco y crudo de las palomas servido en el plato frío del arcén.

Pero...

ya que han salido a relucir las palomas...

Ahí está la "paloma buitre" intentando agenciarse a la "paloma bonita", corretean y corretean hasta que la "paloma bonita" pasa de la "paloma buitre" y nada... a juí!!! (huir) a volar por donde les venga en gana, sin tener que ceder el paso, esperar la luz verde o mirar a su izquierda o derecha.

Palomas, bichos con suerte que no tienen que someterse a cien millones de normas, reglas, preceptos, costumbres, reglamentos, códigos y leyes para sobrevivir a ellas mismas.

I have read an interesting article about how rules condition our life. The reflexion ends telling us "We like that rules that frustrate us"... I guess more than like them, we depend on them. Without these rules everything would be a chaos and chaos is not good for surviving. Yes, but... sometimes one is envious of simple pigeons... "alfa pigeon" is trying to catch "pretty pigeon", when "pretty pigeon" is fed up about the pursuit just flies somewhere, and she don´t have to wait a green light or check left or right, or give the right of way

Pigeons, lucky bugs, they don´t have to obey to one hundred million of norms, rules, precepts, customs, regulations, codes and laws to survive themselves.



pigeon from calvanki on Vimeo.



Pd: Aunque a veces las reglas se saltan, como hoy, que han roto la regla de mi descanso llamándome otra vez para trabajar en mi día libre.

Pd: Although sometimes the rules are skipped, like today, they have broken the rule of my rest calling me again to work on my day off.

sábado, 12 de marzo de 2011

My pequeño Japón.



Londres tiene esas cosas y es por lo que me fascina. Ver a un polaco hablando en Japonés es algo que merece ser grabado, al menos en mi día a día.

Es divertido.

El tipo es Pawel. Llama a Japón. Tiene una familia adoptiva allí y les llama padres y hermanos. Estaba preocupado.

No sé cuantos muertos habrán contado ya, ni cuantos los heridos, y encima ahora parecer ser que las centrales nucleares se quieren sumar a la tragedia.

Yo estuve casi un año trabajando en un Japonés (de verdad) y aunque hondamente siento que todas estas tragedias son igual, no es menos cierto que ésta me toca un poco más de cerca.

Fue un año increíble y una experiencia inolvidable currar con ellos y a todos y cada uno les guardo en el corazón. Taka, Massan, Yuri, Mayumi, Ume, Ayumi, Nozomi, Miku, Haruka, Susuki, Twenty-one, Sakiko... (que me acaba de contestar a un mensaje del facebook, que ella y su familia están bien, que sólo tuvo que dormir en su oficina porque los trenes no funcionan), Kozhue, Shige, Eric, Taigi, Mizuho y todos los demás!!!

No quedan muchas palabras y menos aún consuelo cuando catástrofes de éste tipo acontecen.

Egoístamente, cruzo los dedos, para no recibir ninguna mala noticia; sólo espero que todos estén bien, sus familias, amigos...

Y sólo me queda preguntarme... ¿qué demonios le está pasando a la tierra?

I love London for this kind of things. A Polish guy speaking in Japanese is something to deserve be recorded, at least in my day a day. It´s funny.

But he was talking in Japanese for not a funny reason.

He is Pawel. He was calling to Japan. He have like a family over there. He was worried.

Hundreds dead, thousands missing... It is perturbing.

I was almost a year working in a Japanese Restaurant. I did good friends and it was a unforgettable experience work with all of them. They were my little Japan and I will keep them in my heart forever. Taka, Massan, Yuri, Mayumi, Ume, Ayumi, Nozomi, Miku, Haruka, Susuki, Twenty-one, Sakiko, Kozhue, Shige, Eric, Taigi, Mizuho, and all the rest... I cross finger and all my thoughts are with you and your country!!!

And at the end... I´m just asking myself... what the hell is happening to the earth?

jueves, 10 de marzo de 2011

Una entrada rosa.



En vez de mi primer Cosmopolitan debería haber salido la foto de un niño saltando sobre unos cojines.

En realidad era la foto de una mancha saltando sobre unos cojines, ya que la capacidad de captura del movimiento con luz artificial de la cámara de mi móvil no es que sea para tirar cohetes.

Pero aún así, la foto de la mancha saltando sobre los cojines tuvo que ser borrada.

Estaba en Angel, dentro de una tienda donde los subterráneos imitan una casa antigua. Y vi una escena que hizo que estallara en mi mente la nueva entrada del blog.

Quería hablar de cómo recuperar la infancia, esa inocencia que hace que puedas pasarte una tarde tan pancho y feliz sólo por el hecho de saltar sobre unos cojines. Quería deciros que hecho de menos ser niño y tirarme por el barro, saltar en los charcos, comer con las manos y mancharme toda la cara de chocolate derretido comiendo un helado y que todo da igual porque eres un niño y cuando eres un niño no hay tiempo. Quería una entrada ñoña de nostalgia atronadora y quería contaros que pienso que lo peor que hacemos, lo peor que nos pasa, es dejar de ser niños.

Ocurrió que uno de ellos -eran tres- se dio cuenta que hice esa foto y vino encolerizado hacia mí, paranoico, chillando, exigiendo... sin levantar la vista del suelo, armando un escándalo. Yo le enseñé la foto, le intenté explicar que era para un blog y al final la borré delante suyo -todo esto con el niño en su brote colérico persistente-. Y me fui antes de que vinieran los padres -ni imaginarme quiero a los padres si el producto de paternidad es un ejemplar así-, la policía, los bomberos, la brigada antivicio, los Men in Black y hasta Mr Spock. Porque aquello fue de ciencia ficción.

La borré porque al fin y al cabo el niño tenía razón.

Pero si la infancia es ahora así, yo querría salir corriendo y nunca jamás volver a ella.

Aunque hay alivio. Algunos no dejamos de ser niños, supongo, y suplimos a aquellos mocosos que se comportan como seres de otro planeta inundados de miedos. Uno de ellos es Anibal, el de ahí abajo, que con su pierna rota, su fedula rosa, le pone humor a eso de estar encerrado en su cojera por algunas semanas y alguna que otra más, se calza un sombrero, unas plumas, se come un chicle y se hace cómplice para que le saque de esta guisa en mi blog. Gracias amigo, porque nunca dejarás de ser un niño.

Y, por supuesto, ya que la foto que pegaba era la de Anibal con su pluma y pata rosa, la foto del Cosmo rosa era sólo para fardar que sé hacerlos, y muy ricos.



A few days ago I did a pic. And just after that I lived one of the most embarrassed times in my life. I did a pic of a child jumping over some pillows because I wanted to talk about the childhood and about that the worse thing happen to us is leaving the childhood and that it´s healthy if we are able to keep some of that innocence forever. But, you know, suddenly one of the kids come to me shouting, paranoid, and I had to leave before the police, the firemen, Men in Black and Mr Spock came. I deleted the pic of course because indeed kids was right, I shouldn´t do the pic without their permission. This teach me two things. One: ask before. Two: seeing how are kids today, if I still would be a child the best thing could happen it would be leaving as soon as possible the childhood.

The guy of the pic is Anibal... a wonderful guy who will never leave the childhood and I cheers for that. The first pic is my first Cosmopolitan (I mean, my first Cosmo as bartender), it´s there because it´s pink and pink suit with Anibal´s pic, and because I would have needed a Cosmo after kids´episode.

jueves, 3 de marzo de 2011

32



Estuve en Sitges, Barcelona y Girona por mi cumple. Papá, mamá, hermana, cuñao y esposa del cuñao.

Y hubo de todo.

Una dialéctica sobre los cisnes, que si uno es negro o no lo es o si es blanco o si es un poco de todo, a colación de la última película de Aronofski, dormí varias veces con Risas, una gata que le gusta tocar las pelotas mientras duermes, comí un asadero en el campo, con manta, nevera y vasos de plástico, me subí a un árbol, bebí menos de lo que quise porque andaba malito, aunque algunos tequilas cayeron, desayuné el desayuno más tardón de la historia, inflé globos, intenté convencer a alguno de que se pusiera el Spotify, me tomé unas cañas de nuevo con un tal Pepe que se llama en verdad Andrés, por fin conocí a Bea y coincidí de nuevo con Antonia, no cociné la tortilla de patatas que iba a vencer a la de mi hermana, conduje, por autovía, pero conduje al menos. Me peleé un par de veces con mi padre, y le chillé a la tata, pero siempre todo acabó en abrazos, como los mejores del mundo que son los de mi madre; comí, fumé, bebí y dormí en el suelo en esa casa multiusos del planeta tetris donde me alojé, peleándome con una todas las noches por coger el peor colchón, jugué a un billar negro y perdí contra un saharaui, le hice fotos a unas americanas, pagué algunas rondas y me dejé invitar a otras, vi como a dos que yo sé se les caía la baba con el camarero más guapo del mundo y estuve en una calle donde a la mitad llovía y en la otra no y lo peor es que nadie lo flipaba, intenté comprarme unas conver all star pero como que en Barcelona no están de moda, por mucho que los PandaNeutrones y las que tienen nombres vascos pero son catalanas con familia andaluza se empeñen en que sí; probé unos bombones caseros, conocí al bajista y a la novia del casi-grupo de mi cuñao, digo "casi" porque le falta un cantante y quizás el nombre, pero suenan bien, del carajo vaya; estuve por la arena de la playa y hubo una intentona fallida de bañarse, paseé por un cementerio luminoso, compré Camel en paquete negro con tres milímetros menos de espesor porque una guapa argentina me cameló en un estanco, y me fumé uno en compañía de la hermana de mi mejor amiga que se está abriendo paso en esa tierra donde todos hablan extraño, y una noche me di una vuelta por "Helpsinki" y lo que leí hizo que pasara algo que hacía mucho tiempo que no pasaba: que se me descolgasen algunas lagrimillas; le grabé un video a mi padre para hacer un post titulado "de tal palo tal astilla", probé una butifarra dulce, pero me quedo con las ensaladas de la osa, estuve cuatro veces en el aeropuerto y me confundí dos veces en el parking, bebí un Marqués de Riscal a las tantas de la noche e intenté ver por cinco ocasiones sin éxito la última película de Zeitgeist, que al final vi aquí y no sé por qué me acordé der Dani, jugué al psicólogo y al "veo veo" y a las palabras encadenadas y ya me aburrí con el personaje secreto, descubrí el garito "La oveja negra" pero no me hice la foto de rigor, me cabreé con un "predictor", y escuché tela de la nueva normativa para matricular niños en los colegios, me acojoné sin razón varias veces con algunas curvas, visité again el parque Güel que sigue igual de enigmático que siempre pero si cabe aún con más turistas y descubrí en él un sitio nuevo y cómo a los árboles uno también se puede abrazar, le hice fotos a una chica guapa que intentaba comerse el sol, vi a un tipo levitando y a otro que por no tener dientes creyó que era un mono, no se habló esta vez de política pero si de cuando a uno le aumentan el sueldo, sentí de nuevo el color!!!! Y recordé cómo era aquello de cruzarte con un vecino y saludarse, aunque no lo hayas visto en tu vida y no lo vayas a volver a ver... y el último día retumbó mucho en mi cabeza el "no te vallas, no te vallas -sí, con "LL"-. En definitiva me lo pasé genial, mi cuerpo descansó y me sentí arropado y todo empezó haciéndole cien fotos a unas fresas; porque desde que tengo memoria en mi cumple siempre hay fresas, mi fruta preferida de pequeño y este año las tuve a porrones (con tarta incluída)

Jesús, Claudia, Didi, Diego y Carla: gracias.

I was in Barcelona for my birthday with the people that I love most. It was unforgettable. Down there you have some pictures in the video if you wanna know how amazing they are.

cumpleaños from calvanki on Vimeo.



Pd: Gracias Martita, me he copiado el formato, pero sin tu arte, claro... pero imitándote estoy, pokito a poko.

y cómo no, no podía dejar de colgar esto aquí, pa guardarlo aro está y por si alguien no lo vio en facebook.

I didn´t make that video below, but nothing is better than laughing about yourself